martes, 1 de febrero de 2011

Guillermo Narvarte dejaría de ser el técnico de Olímpico

La crisis del Club Ciclista Olímpico podría arrastrar a varias personas, entre ellas al actual técnico Guillermo Narvarte.
Si bien es cierto, el presidente de la institución, arquitecto Luis Moukarzel brindó su apoyo al cuerpo técnico liderado por el marplatense, en las últimas horas se supo que este fin de semana, el orientador táctico podría dejar su lugar.
¿Quién ocuparía el banquillo? Hay muchos nombres en danza. Uno de ellos es Marcelo Richotti, como primera opción.
Pero no sólo se cambiaría el técnico; también se está pensando cortar a varios jugadores quienes no están rindiendo en la medida de lo esperado.
Sobre este punto la fuente consultada expresó que Diego Cávaco; Diego Guaita; el Kily Romero y algún americano podrían dejar de pertenecer al club.
En cuanto a las futuras incorporaciones se sabe que la dirigencia ya está observando el mercado.

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Ser bandeño

Ser bandeño, no es simplemente haber nacido en La Banda, es sentirse parte de ella, es reconocer su perfume, sus colores, su melodía, es extrañarla si se está lejos, es emocionarse al escuchar el tradicional vals interpretado por uno de sus hijos, el inolvidable Carlos Carabajal.

Ser bandeño es reconocer que se forma parte de una historia en torno a las vía férreas, habiendo caminado por el andén o visto pasar el tren desde el alto nivel, es recordar aquellas despedidas o bienvenidas en la estación, es entristecerse cuando se supo que el silbido de la locomotora dejaría de sonar o sentir el galope del corazón cuando vio que la máquina regresaba.

El bandeño, forma parte de una provincia llamada Santiago del Estero, pero aclara que es de La Banda y sería la persona más feliz si por algún decreto la ciudad fuera declarada “República” aunque fuera por una única vez.

Ser bandeño es llevar en el corazón los colores de Sarmiento, Central Argentino, Agua y Energía, Villa Unión o Banfield. Es enarbolar las banderas de Olímpico y de Tiro o sentirse parte de cada una de las instituciones que conforman esta ciudad.

Un bandeño es aquel que disfruta de las siestas al lado del balneario, de las zambas y chacareras en Los Lagos con la familia Carabajal, el que goza sus vacaciones noche a noche en La Salamanca, el que celebra la fiesta de su ciudad como si fuera propia.

Ser bandeño es tener respeto por aquellos que hicieron la historia y la cultura, es recordar a Domingo Bravo, Dino Taralli, Adela Llugdar, Blanca Irurzum, Nelly Orieta, Apalo Villalba, Martín Rodríguez, Pablo Raúl Trullenque, Cristóforo Juárez y tantos otros que dejaron un lazo que lo une a lo autóctono y a su sentir.

Ser bandeño no es una cuestión simple, es llevar en la sangre esa tierra prometida que está de Santiago hacia el este cruzando el río Dulce, es defenderla, amarla y elegirla como el lugar en el mundo para vivir y morir.


Autor: Mariela Lizondo