miércoles, 6 de abril de 2011

Jugador bandeño podría incorporarse al Pachuca de México

Se trata de Curi Santillán, quien el año pasado vistió la casaca del Club Atlético Banfield. La prueba se llevaría a cabo entre junio y julio de este año.
E la temporada 2010 tuvo una destacada actuación vistiendo los colores del Club Atlético Banfield. (Foto La Banda Diario).
Curi Santillán que durante el 2010 vistió la casaca del Club Atlético Banfield y tuvo una destacada participación en el torneo de ascenso organizada por la Liga Santiagueña de Fútbol, tendrá la gran oportunidad de realizar una prueba en el Club El Pachuca de México.
Al respecto, los directivos del Club Atlético Banfield señalaron, “esto se podría concretar entre junio o julio. Todavía se están realizando las gestiones correspondientes”.
Más adelante se indicó que Santillán fue observado por representantes del Pachuca, mientras éste entrenaba con el equipo de Talleres de Córdoba.
Sobre esta posibilidad, el presidente del Taladro bandeño Mario Cáceres señaló, “la verdad que estamos con muchas expectativas por esta posibilidad que se le presenta a un jugador de nuestra institución. Santillán es un chico con muchas condiciones”.
A la vez añadió, “todavía no está confirmada la fecha en la que podría viajar, pero nos dijeron que podía ser entre junio y julio del presente año”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Ser bandeño

Ser bandeño, no es simplemente haber nacido en La Banda, es sentirse parte de ella, es reconocer su perfume, sus colores, su melodía, es extrañarla si se está lejos, es emocionarse al escuchar el tradicional vals interpretado por uno de sus hijos, el inolvidable Carlos Carabajal.

Ser bandeño es reconocer que se forma parte de una historia en torno a las vía férreas, habiendo caminado por el andén o visto pasar el tren desde el alto nivel, es recordar aquellas despedidas o bienvenidas en la estación, es entristecerse cuando se supo que el silbido de la locomotora dejaría de sonar o sentir el galope del corazón cuando vio que la máquina regresaba.

El bandeño, forma parte de una provincia llamada Santiago del Estero, pero aclara que es de La Banda y sería la persona más feliz si por algún decreto la ciudad fuera declarada “República” aunque fuera por una única vez.

Ser bandeño es llevar en el corazón los colores de Sarmiento, Central Argentino, Agua y Energía, Villa Unión o Banfield. Es enarbolar las banderas de Olímpico y de Tiro o sentirse parte de cada una de las instituciones que conforman esta ciudad.

Un bandeño es aquel que disfruta de las siestas al lado del balneario, de las zambas y chacareras en Los Lagos con la familia Carabajal, el que goza sus vacaciones noche a noche en La Salamanca, el que celebra la fiesta de su ciudad como si fuera propia.

Ser bandeño es tener respeto por aquellos que hicieron la historia y la cultura, es recordar a Domingo Bravo, Dino Taralli, Adela Llugdar, Blanca Irurzum, Nelly Orieta, Apalo Villalba, Martín Rodríguez, Pablo Raúl Trullenque, Cristóforo Juárez y tantos otros que dejaron un lazo que lo une a lo autóctono y a su sentir.

Ser bandeño no es una cuestión simple, es llevar en la sangre esa tierra prometida que está de Santiago hacia el este cruzando el río Dulce, es defenderla, amarla y elegirla como el lugar en el mundo para vivir y morir.


Autor: Mariela Lizondo