martes, 29 de marzo de 2011

Sarmiento goleó a Colegiales por tres a cero

Los goles del Profe fueron convertidos por Hugo De Marco; Mono González y Pablo Ledesma.
En la ciudad entrerriana de Concordia, Sarmiento volvió a sumar de a tres al derrotar a Atlético Colegiales por 3 a 0. Mañana, desde las 11 y a puertas cerradas, se jugarán los 15’ pendientes ante el mismo rival que se imponía por 2 a 1 en el marco de la 12ª fecha.
Los primeros minutos del primer tiempo fueron peleados entre ambos equipos ya que ambos intentaron llegar al primer gol de la tarde. Tanto Colegiales como Sarmiento tuvieron situaciones interesantes en los metros finales pero ambos carecieron de eficacia a la hora de definir.
Con el correr de los minutos, la visita comenzó a insistir poco a poco. De mitad de campo hacía adelante, el “Profe” comenzó a crecer y cada vez que pudo se aprovechó de los errores defensivos del equipo entrerriano.
Sobre los 32’ y en una gran jugada individual en donde eludió a dos hombres locales, Hugo De Marco venció al golero Serrano con un gran remate para establecer el 1 a 0 que se festejó en las tribunas visitantes.
Sarmiento buscó y encontró el gol ante un rival que intentó llegar a la igualdad pero no pudo doblegar a la defensa bandeña.
Este aspecto se repitió en el inicio del complemento. Colegiales salió con todo en busca de un tanto que le permitiese establecer el empate en el marcador, pero el “Profe” se cerró bien atrás y cada vez que pudo salió de contra con la premisa de ampliar el resultado. El local sufrió la expulsión de Martín Muñoz por roja directa tras una fuerte infracción sobre un rival y eso le complicó el planteamiento al DT Gustavo Acosta.
Sarmiento se mostró tranquilo y a los 27’, de la mano del “Mono” González estableció el 2 a 0. El delantero aprovechó, desde los doce pasos, para poner una tranquilizadora diferencia de cara al resto del encuentro.
A partir de allí, Colegiales entró en desesperación y pese a algunos remates de Vercellino o Barone, nunca pudo hacerle frente a lo que produjo su rival.
El “Profe” siguió manejando el terreno de juego y en el final, Pablo Ledesma selló el marcador a los 45’. De Marco entró al área y fue derribado, lo que inmediatamente produjo la señal de la pena máxima por el árbitro. El “chueco” tomó la pelota y no falló en la ejecución para el 3 a 0 final.
Sarmiento cosechó tres puntos importantes que le permiten seguir otra temporada más en el Torneo Argentino “B”. Mañana, irá por otros tres puntos para tratar de meterse en la siguiente fase.
Fuente: abcdeporte

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Ser bandeño

Ser bandeño, no es simplemente haber nacido en La Banda, es sentirse parte de ella, es reconocer su perfume, sus colores, su melodía, es extrañarla si se está lejos, es emocionarse al escuchar el tradicional vals interpretado por uno de sus hijos, el inolvidable Carlos Carabajal.

Ser bandeño es reconocer que se forma parte de una historia en torno a las vía férreas, habiendo caminado por el andén o visto pasar el tren desde el alto nivel, es recordar aquellas despedidas o bienvenidas en la estación, es entristecerse cuando se supo que el silbido de la locomotora dejaría de sonar o sentir el galope del corazón cuando vio que la máquina regresaba.

El bandeño, forma parte de una provincia llamada Santiago del Estero, pero aclara que es de La Banda y sería la persona más feliz si por algún decreto la ciudad fuera declarada “República” aunque fuera por una única vez.

Ser bandeño es llevar en el corazón los colores de Sarmiento, Central Argentino, Agua y Energía, Villa Unión o Banfield. Es enarbolar las banderas de Olímpico y de Tiro o sentirse parte de cada una de las instituciones que conforman esta ciudad.

Un bandeño es aquel que disfruta de las siestas al lado del balneario, de las zambas y chacareras en Los Lagos con la familia Carabajal, el que goza sus vacaciones noche a noche en La Salamanca, el que celebra la fiesta de su ciudad como si fuera propia.

Ser bandeño es tener respeto por aquellos que hicieron la historia y la cultura, es recordar a Domingo Bravo, Dino Taralli, Adela Llugdar, Blanca Irurzum, Nelly Orieta, Apalo Villalba, Martín Rodríguez, Pablo Raúl Trullenque, Cristóforo Juárez y tantos otros que dejaron un lazo que lo une a lo autóctono y a su sentir.

Ser bandeño no es una cuestión simple, es llevar en la sangre esa tierra prometida que está de Santiago hacia el este cruzando el río Dulce, es defenderla, amarla y elegirla como el lugar en el mundo para vivir y morir.


Autor: Mariela Lizondo